
La única variable estratégica absolutamente clave para el desarrollo sostenido, que puede servir como articulador para afrontar los desafíos de la economía del conocimiento del siglo XXI, es la Educación, entendida no como un gasto, sino como una prioridad política y una inversión a medio y largo plazo por el país.
La afirmación surge de la reunión que sostuvieron la semana pasada, en La Casa América de Madrid (España) el ex presidente de gobierno español Felipe González, el secretario general de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), Álvaro Marchesi, y el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias.
El bicentenario podría ser “el elemento catalizador de que una generación latinoamericana decida cómo se inserta la región en el siglo XXI de forma exitosa, y se haga cargo de su propia historia, con la convicción de que la región lo tiene todo, enfrentando los desafíos”, manifestó González.